A partir del 17 de mayo de este año, los Servicios de Ciudadanía e Inmigración de los Estados Unidos anunciaron que los cónyuges de los titulares de una visa H-1B y L-1 ya no necesitarán que se les tomen las huellas dactilares para renovar sus visas.
Este requisito que fue colocado por la administración Trump causó largas demoras en las solicitudes y pérdida de empleos.
Bajo la Ley de Inmigración y Nacionalidad, los cónyuges de los titulares de una visa H-1B y L-1 son elegibles para solicitar la visa H 4 y L-2. Estas visas permiten a estos inmigrantes trabajar temporalmente en los Estados Unidos.
Servicios de ciudadanía y Inmigración de Estados Unidos dijo que la suspensión se suspenderá después de dos años. En los próximos días se dará más información al público.